Los cefalópodos forman parte de la cocina mediterránea y oriental. Desde el punto de vista nutricional, un cefalópodo es un alimento muy beneficioso para el organismo. Entre otras muchas propiedades, su consumo favorece el sistema inmunológico, además de colaborar en la formación de huesos, cartílagos y dientes.
Los cefalópodos constituyen un alimento muy rico en diferentes nutrientes, pero aporta muy pocas calorías. Se calcula que 100 gramos de un cefalópodo aportan menos de 80 calorías.
Los cefalópodos son una fuente importante de agua, ya que casi el 80% de su composición se debe a este líquido elemento, y también en proteínas (casi unos 18 gramos de proteína por cada 100 gramos de cefalópodo), además de diferentes minerales. Entre los minerales contenidos en los cefalópodos podríamos destacar el zinc. El contenido de zinc en los cefalópodos es, en general, aproximadamente 1,7 mg. por cada 100 gramos. Entre las funciones en que el zinc participa podemos destacar la contractibilidad de los músculos, el crecimiento del pelo y las uñas o ayuda en la cicatrización de heridas.
Pero los cefalópodos además de zinc, contienen otros minerales muy interesantes para la salud. Por ejemplo son ricos en calcio, fósforo, yodo, potasio o selenio. Este último mineral, retrasa el proceso del envejecimiento de las células del organismo, a la vez que le confieren propiedades preventivas contra el cáncer.
Los cefalópodos también aportan al organismo diferentes vitaminas. Entre ellas destacaremos la vitamina B12. Esta variedad de vitamina, favorece el funcionamiento de diferentes sistemas del organismo, como son el sistema circulatorio, el sistema inmunológico y el sistema nervioso.
Anillas de pota
Pota es el nombre que recibe cierta especie de molusco marino con un aspecto similar al del calamar, con el que suele ser confundido. Los platos elaborados con pota son prácticamente los mismos que los realizados en base a los calamares, aunque suele preferirse cortadas en rabas o anillas.

Calamar
El calamar, también llamado jibión, es un molusco marino con cabeza provista de tentáculos y que presenta una bolsa de tinta comestible de uso culinario. Los ejemplares de pequeño tamaño, es decir, los más jóvenes, reciben el nombre de chipirón.

Pota
A las potas también se las llama calamares voladores o luras. Son unos cefalópodos similares en apariencia al calamar, pero de menor calidad gastronómica. Su cuerpo es alargado, presenta una concha interna o pluma y una bolsa de tinta de color pardusco.

Pulpo
Es un molusco que carece por completo de concha y que puede llegar medir hasta 80 centímetros de largo. Tiene en la cabeza un pico córneo y 8 tentáculos del mismo tamaño, provistos de 2 filas de ventosas. Se pesca en las proximidades de la costa del Atlántico y del Mediterráneo.

Rejo de potón
La pota, también conocida como calamar gigante, es un cefalópodo de calidad inferior al calamar. Hay varias especies de la familia como la pota voladora, que es de tamaño pequeño o la pota argentina, a la que le otorgan mayor calidad.

Sepia
La sepia común es un cefalópodo de unos 20 centímetros de largo que habita en fondos costeros con presencia abundante de algas. Su cuerpo es oval, gris-beige, con reflejos malvas.
